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martes, 8 de mayo de 2012

Verso acabado, punto.

Yo de veras lo intenté, hice todo lo posible, puse cuerpo y alma para hacerte ver que la vida no es la oca, que no existe una casilla que te haga volver a empezar. Me esforcé para que vieses que si no cuidas lo que tienes un día lo pierdes. Dí todo de mí para que te convencieras de que sin esfuerzo no hay nada en esta vida. Te enseñé a cuidarte, a cuidarme, a cuidar tu alrededor. Pero, ¿qué digo? Lo hice, y lo conseguí. Aprendiste a ser una persona increíble, nueva. Bien es cierto que fue gracias a mi y a que yo te iba sujetando ese gran mundo que ibamos reconstruyendo. ¿Qué ha pasado? A ti te gustaba esa vida. Te gustaba ser tú. Ahora no eres nada, no eres nadie. Andas buscando en la basura unos restos de algo que ya no existe porque tú lo dejaste caer y como no hay nadie para sujertartelo lo dejaste perdido por algún rincón alguna noche a las tantas de la madrugada al lado de una copa con los hielos derretidos.

1 comentario:

  1. Siento tardar tanto en contestar, princesa, pero ya estoy de vuelta :) Muchas gracias por pasarte y comentar y sobretodo por sacarme una sonrisa! Estoy encantada de que te guste mi blog, y mis fotos y espero que quieras seguir disfrutándolo por mucho tiempo. Ando algo pillada y apenas he leído tus textos, este último sí, y me parece que no escribes nada mal, de verdad :) Te sigo y prometo pasarme para echar un vistazo en cuanto pueda.

    ¡Que tengas muchas sonrisas!

    Muack.
    Anais.

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